lunes, 23 de febrero de 2009

Porqué nos odiamos

Cuando alguien ve salir del kiosko a otro con el ABC, El Mundo, o El País bajo el brazo, ya esta retratado: ¡con ese panfleto qué se puede esperar de él!

Por supuesto, los medios tienen una parte de culpa, pero la mayor parte de culpa, esta en origen, en la política. No es razonable pensar que el presidente que tenemos, a pesar de que no pasará a la historia como un estadista, le traiga al fresco que haya 4 millones de parados. No es razonable pensar que el jefe de la oposición diga que le llamen cuando el país este en quiebra.

No es verdad, ninguno de los dos es un inútil, ni esta en política para hacerse rico, ni porque no tiene otra cosa que hacer, ni porque atesore la verdad absoluta sobre nada.

El problema es que están obligados, siempre hay unas elecciones que justifiquen descalificar al contrario. ¿Acaso los chorizos que existen en el PP no existen en el PSOE? Pues claro, pero eso solo implica que tienen los mismos lógicos problemas, no que sean rematadamente malos.

Es necesario resolver el problema que están generando en la calle: rojos y fachas, educados y no educados, cultos e ignorantes,... ¡Basta!, nada de esto es cierto. Sobre todo con la que esta cayendo, vamos a necesitar la colaboración de todos.

Tenemos que acabar con la bronca gratuita en la que se ha convertido la política española en los últimos 10 años y que amenaza con arruinar nuestra convivencia, cuando más vamos a necesitarla.

He aquí, algunas ideas:

Compromiso de los líderes políticos
  • Estamos permanentemente en campaña electoral. ¿Porque no hacemos coincidir todas las elecciones en el mismo mes para dejar de trabajar al que gane 4 años?
  • Todas las votaciones en Las Cortes serán secretas, para favorecer el voto personal en lugar del de partido.
  • Todos los gobiernos estarán obligados a pactar al menos X leyes en cada año de sesiones, no solo con sus votos.
Compromiso de los periodista
  • Los periodistas llamaran Sr. Juez, omitiendo su nombre, a cualquier magistrado cuando comenten algo sobre su trabajo.
Compromiso de los presidentes de Senado y Congres
  • Las descalificaciones serán prohibidas en Las Cortes, al igual que los insultos.

Obligación para presentarse a unas elecciones


  • Todos los partidos políticos estarán obligados a organizar un departamento de asuntos internos.
¿Qué algunas obligan a cambiar leyes? Estoy seguro de que se podría hacer un gran pacto para respetar estos principios sin cambiarlas.

¿Qué algunas obligan a que los partidos políticos pierdan poder? No creo que una pequeña dedicación para convencer a los propios parlamentarios de lo que tienen que votar fuera negativa. No creo que un tiempo obligados a escuchar al contrincante para pactar sea negativo.

Estas ideas no resuelven por sí solas ninguna crisis, pero no son más de lo mismo. Ninguna acción concreta de ningún gobernante servirá para resolver esta crisis, pero muchas pequeñas cosas, de todos, una detrás de otra, si lo conseguirán.

Pedro Puig

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Un hombre se hallaba, moribundo, en la cama de un hospital. Era un hospital de campaña quizá, con camas de tubo, mantas grises y azulejos blancos en las paredes. Sentada a su lado, estaba una monjita, velándole, callada, las manos sobre su regazo. El hombre, asustado, le pregunta:
-¿Qué me pasa?
La monjita le contesta humilde y calladamente que no sabe. El hombre, entonces, armado de soberbia le dice que él, por supuesto, sí sabe lo que le pasa: se está muriendo; lo sabe porque él es más inteligente que ella, él es obispo, pero está asustado y necesita que lo tranquilice. Necesita que ella le diga que todo va a ir bien...Al final, es ella quien tiene las respuestas a su angustia.

Siempre pienso en esta historia, que bien podría ser un sueño, cuando a veces la sabiduría no es suficiente.

¿Que por qué nos odiamos? Porque nos asusta lo que desconocemos.

Pedro Puig Montserrat dijo...

Efectivamente los conocimientos son, como digo a menudo, mucho menos importantes que la experiencia que da la vida que, al final, genera conocimiento.

También es verdad, que odiamos a lo que no conocemos, a lo que no entendemos. Sin embargo creo ue el símil que me ha propuesto un amigo mío, se acerca más a la política y cómo la percibimos todos: el que es del Barça siempre será del Barça, el del Madrid siempre será del Madrid. Lo único que harán los forofos es que si uno juega mal, dejarán de ver futbol, pero jamás se cambiarán.

¿Los del Madrid siempre quieren que pierda el Barça?

¡Cambiemos eso!