domingo, 5 de noviembre de 2017

Catalánkistan

Ayer, una de la personas que más quiero, que considero muy racional, entre insultos muy graves, sin ninguna provocación, que yo sepa, me aclaró que el culpable de la situación actual era el opresor gobierno de mi país y que el ex-gobierno de la Generalitat y la mesa del Parlament tuvieron que saltarse las leyes empujados por el gobierno opresor.

Sé que una parte de lo que voy a escribir no tiene ningún sentido y es imposible, pero también era imposible la República en la revolución de las sonrisas y, además, está motivado por los insultos recibidos que me han dejado en un estado de devastación absoluto, me retiro.

Siempre he criticado que el Barça no sacara un comunicado diciendo que respetaba todas las sensibilidades políticas, pero que lo suyo era el fútbol. Yo comunico formalmente que lo mío es vivir y que mi relación con la política es votar al menos tres veces cada cuatro años para elegir a mis gobiernos municipal, autonómico y de estado.  Que no estoy dispuesto a participar en ninguna asamblea ni referendum para tomar ninguna decisión, que para eso elijo y pago a mis gobernantes. Que ni siquiera me involucraré, después de esta carta, en dar mi “opinión” sobre ningún tema.

Me imagino que esto es gracias al consejo que me ha dado mi madre, que no me preocupe porque no puedo hacer nada. Si no tuviera hijos que cuidar le habría dicho a mi mujer que nos exiliáramos a otro país.

El responsable de la situación actual solamente tiene un nombre (no es culpable de casi nada, pero es el responsable) y es el presidente del gobierno, D. Mariano Rajoy Brey. Solicito urgentemente su dimisión y que convoque a elecciones a las que no se presente. Si lo hiciera, solicito a sus votantes un castigo ejemplar.

Solicito una amnistía para los Jordis, el ex-gobierno de la Generalitat que está en la cárcel y la que estará en breve, cuando se le pase o le hagan pasar la cobardía; también a la mesa del Parlament. La única condición es el exilio, es decir, si son detenidos en territorio español, se les dará un juicio justo por los delitos que han cometido.

Solicito un referendum en Catalunya que pregunte: ¿Estaría Ud. dispuesto a crear un nuevo país en forma de República, aunque tuviera que abandonar su hogar y su puesto de trabajo? El resultado serviría para saber cuánta superficie necesitaría la nueva República (por cierto, el nombre no podría contener Catalunya ni ninguno de sus derivados, ni catalakistan).

Solicito al gobierno de mi país que dé todo el soporte necesario para constituir esta República hasta que sea capaz de desenvolverse sola. También solicito que vete su ingreso en Europa hasta que no respete la separación de poderes y los principios de solidaridad e igualdad que tienen todos los estados miembros. También solicito que se establezca un férreo control de fronteras, como el que actualmente se tiene con Marruecos.

En función del resultado del referéndum se establecería un área, de límite la actual provincia de Girona, en la cual se crearía la nueva República. Los independentistas que consideran una mierda a mi país podrían entonces cerrar y vender sus casas, en su caso, despedirse de su trabajo, en su caso, cargar sus coches y dirigirse al norte a su Ítaca, su Arcadia o su tierra prometida en donde, como dice la Biblia, “las uvas serán como melones”. Por cierto, para evitar el problema palestino actual, quien organice este movimiento de gente debe tener en cuenta a los nietos de quien se vaya de Girona, antes de que lo consideren su tierra.

Viva la revolución de los lamentos, gritemos bien alto; ¡Que se vayan!


Gracias por explicármelo Xavi.